lunes, 22 de julio de 2013

Movimiento contra la Intolerancia- Campaña Día de Acción Europea contra los Crímenes de Odio

                                            

En memoria de las víctimas de la matanza terrorista de Utoya y Oslo
22 de Julio

Día de Acción Europea contra los Crímenes de Odio


Se cumplen dos años de la mayor matanza  que ha vivido Noruega desde la II Guerra Mundial, realizado por un neofascista que acabó con la vida de 76 personas, en su mayoría jóvenes  laboristas, a los que asesinó por defender una Europa multicultural. El innombrable asesino era  un terrorista alimentado por su ideología  racista, islamófoba y de extrema intolerancia, ideología compartida por una ultraderecha que está empeñada en destruir la democracia, la igualdad, la tolerancia y la convivencia intercultural, liquidando todas las conquistas planetarias en materia de derechos humanos.
Esta tragedia de terrorismo de odio desgraciadamente ha ido acompañada de otros crímenes que  han conmocionado a la ciudadanía de bien en la Unión Europea. La aparición de la asesina célula neonazi  en Alemania, los crímenes racistas contra inmigrantes en Italia, la persecución inhumana y criminal de gitanos en diferentes países del continente, los ataques a judíos, a musulmanes y sus lugares de culto, las agresiones a homosexuales y los ataques a personas y organizaciones negando su diversidad, y los intentos de matanzas similares en París y Mallorca, configuran un panorama inquietante en toda Europa.
Es fundamental no olvidar y recordar a las víctimas de los crímenes de odio.  Vivimos tiempos de olvido, donde resulta imprescindible y radicalmente  necesario mantener la memoria del las víctimas y el compromiso solidario, el reforzamiento democrático frente al odio y de lucha para avanzar en todos los ámbitos frente a las lacras del racismo, la xenofobia y la intolerancia que vuelven a estar amenazadoramente presentes en nuestro continente.  Esto es objetivamente ineludible.
Para recorrer  en este camino en defensa de la dignidad humana, de los valores democráticos y de los derechos humanos, resulta necesario que nuestras instituciones avancen, promuevan e instituyan el Día Europeo en Memoria de las Víctimas de Crímenes de Odio, que mantenga vivo el compromiso de solidaridad con quienes más  sufren e inviten a toda la ciudadanía a un ejercicio democrático de movilización en defensa de la víctima de odio. Entendemos que en memoria a tanto sufrimiento, el día 22 de Julio nos recuerda directamente a las víctimas en Oslo y Utoya, y a su vez nos permite referenciar una permanente llamada a la Justicia que emerge de este dolor compartido frente a los crímenes de odio. Propuesta que trasladamos al Parlamento Europeo para su aprobación.
El Consejo de Europa y el “No Hate Speech Movement” han declarado Día de Acción Europea contra los Crímenes de Odio. Invitamos a la ciudadanía europea, a su sociedad civil, a  las entidades e instituciones a apoyar esta iniciativa, a trasladarlo al Parlamento Europeo y al resto de poderes públicos, a sumarse a las acciones que se desplieguen en este sentido.
En Oslo, Madrid, Roma, París, Varsovia, Berlín….          22 de julio de 2013


Organizaciones que apoyan la iniciativa
En Europa
Movimiento contra Intolerancia
CEJI, una contribución judía a un mundo inclusivo
ERRC, European Roma Rights Centre
INACH, Red Internacional contra el odio cibernético
Fundación Magenta, Países Bajos
ILGA Europa
ENAR, Red Europea contra el Racismo
Autoridades Norvegian
Partido del Trabajo Noruego - sección de jóvenes

En España
Movimiento contra la Intolerancia      
Red Europea contra los Crímenes de Odio
Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica 
Partido Socialista de Madrid (PSOE)
Izquierda Unida
Unión Sindical de Madrid de CC.OO.
Unión General de Trabajadores (UGT)
Fundación Violeta Friedmann
Asociación de Víctimas de la Violencia Fascista, Racista y Homófoba
Acción Popular contra la Impunidad     
Plataforma Ciudadana contra la Islamofobia
Federación de Agrupaciones Islámicas por la Convivencia en España (FAICE)  
Centro Cultural Islámico de Valencia.
Federación de Musulmanes en España
Instituto Halal
Junta Islámica
Unión de Mujeres Musulmanas
Voluntariado de Madres Dominicanas. 
Asociación Rumiñahui de Ecuador.
Asociación de Refugiados e Inmigrantes Peruanos en España (ARI-Peru)
Asociación cultural colombiana ACULCO.
 Confederación  de Asociaciones Iberoamericanas.
Federación de Entidades Latinoamericanas (FEDELATINA)
Centro Panafricano   y   Revista Wanafrica
Asociación Pro Inmigrantes de Córdoba - Acoge
Asociación Iberoamericana para la Cooperación el Desarrollo y los Derechos Humanos
Unión Romaní    
Fundación Secretariado Gitano
Asociación de Mujeres Gitanas Alborea
Plataforma de Iniciativas Gitanas Madrid
Plataforma Valenciana por la Interculturalidad
Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales     
Fundación Triangulo                  
Colectivo Gay de Madrid (COGAM)
Red Cívica contra el Antisemitismo    
Comunidad Judía de Madrid
Consejo de la Juventud de Navarra.
Consejo de la Juventud de León
Foro Social de Madrid
Asociación Unificada de Militares Españoles  (AUME)
Federación de Asociaciones de Vecinos de Madrid

EQUO

Moulaye busca al matón racista con apoyo de Movimiento contra la Intolerancia

Cuando Moulaye Ndiaye se inclina, un latigazo de dolor sacude su abdomen. El senegalés todavía no controla los engranajes de su frágil anatomía. Y eso que encadena once meses conviviendo con los rabiosos envites de una agresión que le asomó a la muerte. Un desconocido le arrojó por un puente de seis metros de altura en Buñol(Valencia). La secuencia se produjo durante una madrugada de fiesta mayor ante 10.000 personas. Casi nadie vio nada. O eso dijeron. No hubo detenidos. Solo un testigo declaró a la Guardia Civil. La víctima busca ahora al culpable del batacazo que le causó una lesión medular, la rotura de varias costillas y la pérdida de visión del ojo derecho. “No guardo rencor, pero sí pido justicia”, sentencia. Mientras apura su lenta recuperación, el inmigrante protagoniza una campaña ciudadana para cercar al agresor mediante carteles y la plataforma Change.org, que roza ya las 36.500 peticiones. Quiere verle la cara al odio.
La vida de Moulaye, de 39 años, estalló a las 4.30 del 29 de agosto de 2012. Un rato antes, el senegalés había llegado a Buñol para vender gafas y sombreros en la concurrida Empalmà, que es como se conoce a la madrugada previa a la fiesta de la tomatina, una guerra despiadada de tomatazos que atrae cada año a 40.000 visitantes. “Pensé que podía ganar 30 euros por 12 horas de trabajo”, recuerda. En las casetas instaladas en la Curva de la Jarra, un enclave a las afueras del pueblo esculpido por frondosa vegetación, se respiraba diversión. Corría el alcohol. Moulaye desplegó su mercancía de artículos luminosos junto a la barandilla. Cuando levantó la cabeza estaba rodeado. Cinco jóvenes descamisados le miraban fijamente. El más bajo y musculado, un veinteañero de 1,70, pelo muy corto y pantalón blanco, le arrebató unas gafas.
—Amigo, devuélvemelas. Solo quiero ganarme la vida.
—Vete a tu país, negro.
El senegalés se dio media vuelta. Imaginó que sería un episodio más delcentenar de gestos racistas que acumula desde que llegó a España hace siete años. Escupitajos, zarandeos, miradas desafiantes. “Pronto me di cuenta de que esta vez era diferente. No se iban”. Y así fue. Tras la advertencia la emprendieron a golpes contra él. Un agonizante minuto después, llegó el empujón que le precipitó al vacío de espaldas. Su mochila cargada de sombreros amortiguó el impacto. Le salvó de una vida en silla de ruedas, como le dijeron en el hospital valenciano de Manises, donde se despertó, desconcertado, y permaneció 26 días muy grave.
¿Dónde está el criminal? Se esfumó por la maleza tras una persecución de película. Hoy se sabe que se puso una camiseta de tirantes morada para difuminarse entre la muchedumbre, según el único testigo, Ricardo Zanón. “Dijeron: ‘Vámonos de aquí, que lo hemos matado”, relata por primera vez este vecino, que avisó a la Guardia Civil e insiste en que la pandilla del odio no era de Buñol. El testigo se encaró al agresor para recriminarle su ataque. El matón echó a correr por una empedrada calzada que esta semana amanecía desierta.
La Guardia Civil mantiene abierta la investigación con la esperanza de nuevas confesiones. Moulaye no ha reconocido al delincuente entre la veintena de fotos que le han mostrado. “No quiero acusar injustamente a nadie”, apunta, mirando al suelo. Para garantizar las pesquisas,Movimiento contra la Intolerancia recurrió el archivo del caso. El senegalés declarará el próximo miércoles en el juzgado de Instrucción número 4 de Requena. Entre tanto, Buñol trabaja a contrarreloj para que el suceso no empañe su fiesta mayor del 28 de agosto. El municipio de 10.000 habitantes evitará este año los chiringuitos junto al puente de la discordia y duplicará los agentes de seguridad (400), según el teniente de alcalde, Rafael Pérez.
El senegalés no es una rara avis. Su agresión coincide con un ligero rebrote del odio. Movimiento contra la Intolerancia detectó el pasado año 346 agresiones racistas, un 5% más que antes de arreciar la crisis.
Son las 13.00 en la soleada casa de Moulaye, en el barrio valenciano de El Cabanyal. A dos minutos caminando emerge el mar, metáfora de la contradicción. Como miles de subsaharianos, el protagonista de esta historia desafió a la muerte en patera. El viaje de la desesperación transcurrió durante una semana de septiembre de 2006 en una barcaza fletada por “hombres malos” que transportó 94 vidas. “Un compañero desfalleció por la fiebre”, recuerda desencajado. Él pagó por llegar a La Gomera 1.300 euros, el equivalente a un año de su salario como conductor de autobús en la ciudad de Mbacke, donde residen sus cinco hermanos y su madre.
Se lo pensó mucho antes de emprender la aventura. Una frase en su idioma wólof sentencia que a la mitad de las pateras se las traga el mar. Pero la barca y el riesgo se revelaron como el único salvoconducto para huir de la desgracia en un país donde un tercio de la población (cuatro millones) sobrevive con menos de un euro al día, según el Banco Mundial. Quizá por eso, Moulaye no tiene fotos de Senegal en casa. Sus recuerdos planean en forma de viandas de cuscús y arroz con pescado que degusta cada noche cuando rompe el ayuno del ramadán. “Si tuviéramos dinero, seríamos completamente felices”, indica este hombre, que antes del accidente se pateaba las ferias de Valencia por 180 euros al mes para enviar 60 a su madre.
El senegalés Musa Samba, de 31 años, ha sido durante casi un año el ángel de la guarda de Moulaye, que tras la agresión obtuvo un permiso de residencia temporal y sueña con aprender el oficio de electricista. Moulaye ayudó antes a su benefactor con un techo y un plato de comida. “Un amigo no debe dormir nunca en la calle, ni pasar hambre”, sentencia el accidentado. Musa ha correspondido este año asistiéndole como enfermero. Le dio de comer, le vistió y le mantuvo económicamente durante la larga convalecencia. El protector se dedica a recoger naranjas. Cobra un 70% menos que un español. Y hace años que perdió la cuenta de los empresarios que le estafaron cuando carecía de papeles. Pero no se queja por eso. Como su amigo, reprocha el inexplicable odio al negro hambriento de una minoría. “¿Por qué? Solo queremos ganarnos la vida”.En el hogar de El Cabanyal solo se escuchan historias de miseria. Pero se sonríe. Como el pan de los pobres, todo se comparte. Quien trabaja ayuda al parado. Planea un sentimiento de solidaridad que reconcilia con la condición humana. Los cuatro inquilinos se han sentido en algún momento ganado. Conocen la humillación de que se les rocíe con cerveza. Saben lo que es recibir una patada de madrugada por extender una manta con CD. O que se les expulse de un bar antes de entrar. El repertorio de insultos recibidos bascula entre el “negro de mierda” y la amenaza de muerte. Aun así, cuesta arrancar malas palabras. “Estoy acostumbrado. No me importa agachar la cabeza, irme cuando me insultan”, admite Moulaye.

jueves, 6 de junio de 2013

El PP rechaza el homenaje al alcalde y ediles de Farnals fusilados en 1940


El PP rechaza el homenaje al alcalde y ediles de Farnals fusilados en 1940
06.06.2013 | 01:24
v. contreras la pobla de farnals El PSPV de la Pobla de Farnals ha organizado para el próximo fin de semana dos actos de homenaje a los once vecinos de la localidad que fueron fusilados al terminar la Guerra Civil. Entre ellos está el que fue último alcalde republicano de la Pobla, Enrique Pérez Badia, quien fue ejecutado junto al menos otros cinco poblatanos en el paredón de Paterna un 12 de septiembre de 1940. Pese a la presencia de un alcalde y de varios concejales entre los homenajeados, en el pleno del pasado 29 de mayo el equipo de gobierno del PP votó en contra de que el reconocimiento se hiciera a nivel municipal, por lo que han sido los socialistas los que han decidido montar el acto por su cuenta.
Ayer, y en declaraciones a Levante-EMV, el alcalde José Manuel Peralta justificó el rechazo de su partido a este homenaje público en que "nosotros nos dedicamos a la política del siglo XXI y no estamos pensando en la gente que murió hace más de 70 años".
Aún así, el regidor popular quiso subrayar su "respeto a los muertos de uno y otro bando" y destacó que, aunque el ayuntamiento no participará en el homenaje, ha dado todas las facilidades para que se lleve a cabo.

Condenan a 1 año y 9 meses a un jugador que agredió a un árbitro


Condenan a 1 año y 9 meses a un jugador que agredió a un árbitro
El acusado ha reconocido que después de ser expulsado agredió al árbitro propinándole una patada y un puñetazo
06.06.2013 | 01:24
EFE | Valencia Un jugador de fútbol aficionado ha aceptado hoy una pena de un año y nueve meses de prisión por agredir en 2007, durante un encuentro de fútbol 7 celebrado en la localidad valenciana de Sagunt, al árbitro que le había amonestado y que perdió tres piezas dentales debido al golpe recibido. La condena es fruto de la conformidad alcanzada hoy en el juicio celebrado en la Audiencia de Valencia por un delito de lesiones, en el que el acusado ha reconocido los hechos y también ha aceptado la prohibición de jugar al fútbol por el tiempo de la condena, tanto en competiciones federadas como en las que no lo sean pero dependan de la administración.
Las partes no se han puesto de acuerdo, no obstante, en la atribución de la responsabilidad civil, si es directa o subsidiaria del acusado, Ayuntamiento de Sagunt o la aseguradora del mismo. Tampoco han coincidido en la cuantía de la indemnización que solicitan para la víctima; mientras el Fiscal fija un montante de 16.073 euros por daños y secuelas, la acusación particular eleva la cifra a 26.000 y las defensas -Ayuntamiento, aseguradora y acusado- piden la absolución de su representado o, en su lugar, la asunción de una responsabilidad subsidiaria.
Los hechos juzgados se remontan al 14 de diciembre de 2007 cuando, durante la celebración en el polideportivo municipal de la localidad valenciana de Sagunt de un partido de fútbol en el marco del Campeonato municipal sénior de fútbol 7 organizado por este Ayuntamiento.
Alrededor de las 20 horas, el acusado, que participaba en el encuentro como jugador del equipo Cantabria Glas, después de ser expulsado, agredió al árbitro propinándole una patada y un puñetazo en la cara. El árbitro sufrió una contusión bucal con rotura de prótesis dental y pérdida de tres piezas dentales que precisó cirugía y 306 días para su curación total.
Debido a estas lesiones padece desde entonces un trastorno psicopatológico reactivo por el que recibe tratamiento con ansiolíticos y antidepresivos. El fiscal reclamaba inicialmente 4 años de prisión por estos hechos por considerarlos un delito de lesiones y contemplaba la atenuante de dilaciones indebidas.
Después de que el acusado, Adrián M.S., vecino de Port de Sagunt, haya reconocido hoy los hechos, las partes han llegado a una conformidad que fija la condena en un año y nueve meses de prisión más la prohibición de jugar durante este tiempo en campeonatos de fútbol federados u organizados por alguna administración.
En la discusión sobre la responsabilidad civil, la acusación particular ha denunciado que el encuentro no contaba con medidas de seguridad en su opinión necesarias, como presencia policial. Por contra, la defensa ha aseverado que, al contrario que en las competiciones federadas, un encuentro de esta categoría no está obligado a esta medida y que, en todo caso, la presencia policial "seguramente no puede evitar agresiones de este tipo, sorpresivas".
Según ha explicado la víctima a los periodistas al finalizar el juicio, todo sucedió "muy rápido", después de que uno de los equipos metiera un gol en el minuto 5 de partido y un jugador del equipo contrario se quejara del arbitraje "insistentemente y de malos modos".
"Le dije que si continuaba así le expulsaba y, en un momento dado, me golpeó brutalmente", ha relatado Manuel Castellar, que, con "más de 60 años", no ha vuelto a arbitrar desde que sufrió esta agresión. Espera que, aunque la condena no sea "muy grande", su caso sirva de ejemplo y se trate de evitar la violencia en competiciones tanto profesionales como de aficionados porque "no se puede tolerar".

Dos años de prisión por dejar ciego de un ojo a un hombre de un puñetazo tras una discusión


Castellón
04.06.13 - 20:22 -
EP | CASTELLÓN
de la Audiencia Provincial de Castellón ha condenado a un hombre a dos años de prisión y a pagar una indemnización de 69.298 euros por lesionar a otro, al que le provocó la pérdida de visión de un ojo, en el transcurso de una discusión.
La sentencia considera probado que el 9 de agosto de 2009 el acusado se encontraba junto a otras personas en una vivienda de Benicarló, cuando comenzó a discutir con una de ellas, a la que propinó dos puñetazos.
Los golpes impactaron en el ojo izquierdo y en el labio de la víctima, que comenzó a sangrar y fue trasladada al Hospital Comarcal de Vinaròs. La sentencia señala que aunque el acusado tuvo intención de lesionar al otro, no pretendía causarle tanto daño como el finalmente producido, pues le diagnosticaron una herida penetrante en el globo ocular y otra en el labio.
La víctima permaneció ingresada cuatro días en el hospital y precisó para la curación de sus lesiones 60 días, mientras que le quedó como secuela una pérdida de la visión del ojo. En octubre de 2009 la Seguridad Social acordó calificarlo como incapacitado permanente en grado de absoluta.
La sala considera que los hechos son constitutivos de un delito de lesiones en concurso ideal con un delito de lesiones imprudentes y rechaza la petición de la defensa de aplicar la atenuante de arrebato u obcecación, pues señala que se podría estar ante un acaloramiento, pero no ante la concurrencia de un estímulo tan poderoso que impidiera al acusado tomar conciencia de aquello que se estaba produciendo.

El hombre que disparó a otro en un bar de Turís se entrega a la Policía


El hombre que disparó a otro en un bar de Turís se entrega a la Policía

El arrestado, que cuenta con numerosos antecedentes, discutió con su víctima por una simple servilleta

04.06.2013 | 01:36
ignacio cabanes valencia El hombre de 35 años que presuntamente disparó a otro, de 30, en un bar de Turís el domingo por la tarde, se encuentra ya detenido en dependencias de la Guardia Civil, después de que el sospechoso se entregara voluntariamente en la comisaría de Policía Nacional de Torrent pocas horas más tarde. El presunto autor del tiro que hirió en el brazo a José Andrés Z., que continua ingresado en el Hospital La Fe de Valencia, se vio acorralado por la Guardia Civil y por la Policía, que había establecido controles en varios municipios de la zona, por lo que a medianoche optó por acudir a las dependencias policiales para entregarse.
Esta agresión con arma de fuego, de la que informó ayer en exclusiva Levante-EMV, se produjo tras una discusión por una cuestión banal en el bar "El Chaparral" de Turís. De hecho algunos testigos apuntaron que todo se inició por una simple servilleta que uno de ellos tiró al suelo. Seguidamente ambos se insultaron y, en un momento dado de la disputa, G. P. C. se marchó y regresó armado con una escopeta de cañones recortados, con la que disparó a su víctima. Esa misma mañana ambos ya habían tenido un enfrentamiento verbal en otro bar de Torrent. Además el ahora detenido, que cuenta con numerosos antecedentes, también agredió con la culata del arma al propietario del local, que recibió puntos de sutura.

lunes, 3 de junio de 2013

El ayuntamiento veta ir de uniforme a un curso de homosexualidad y policía


El ayuntamiento veta ir de uniforme a un curso de homosexualidad y policía
La asociación de agentes gays y la Universitat organizan una jornada académica sobre Policía y diversidad sexual
29.05.2013 | 00:00
r. montaner valencia La Universitat de València y la Asociación de Policías Gays y Lesbianas (Gaylespol) han organizado la primera jornada académica que se celebra en España sobre Policía, diversidad sexual y derechos. Uno de los codirectores de la jornada y agente de la Policía Local de Valencia, Ernest Gómez, criticó ayer que el intendente general de este cuerpo municipal, Andrés Rabadán, le haya prohibido vestir de uniforme en el curso "por ser una jornada ajena al ayuntamiento".
Gómez califica esta resolución de "discriminatoria con respecto a otros cursos sobre violencia de genero o seguridad vial donde si se permite ir de uniforme". El portavoz de Gaylespol señala que la concejalía de Seguridad que dirige Miguel Domínguez "no ha contestado" a la invitación a que el ayuntamiento participe en las jornadas, así como tampoco lo ha hecho el PP. Además, alerta de "presiones" para impedir que mandos y agentes de la Policía Local de Valencia participen en las mesas de debate, como si lo harán el jefe de la Policía Local de Gandia, varios policías nacionales y agentes locales de municipios catalanes.
Entre los objetivos de este curso que se celebrará el viernes destacan: Difundir las buenas prácticas de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para la gestión policial de la diversidad, con atención a las demandas de las personas lesbianas, gays, transexuales o bisexuales (LGTB); sensibilizar a los agentes ante las conductas discriminatorias por razón de la orientación sexual e impulsar un trato policial respetuoso e igualitario; y "facilitar que los profesionales de la policía que son personas LGTB adopten una actitud natural respecto a la propia orientación sexual en su vida laboral, potenciando la normalización e integración".