miércoles, 27 de junio de 2012

Juicio a polícias locales de Valencia por insultos racistas


Movimiento contra la Intolerancia.-  La Fiscalía pidió  al comenzar el juicio que seis policías locales de Valencia sean condenados a sendas penas de tres años y medio de prisión por detener ilegalmente al dueño de un bar del barrio del Carmen. El propietario de local, de origen sudamericano, denunció que los agentes profirieron insultos racistas contra él y su hijo. Los policías aseguraron que su intervención fue proporcionada y acusaron al dueño del local y a su hijo de actuar de forma violenta. El fiscal pide una multa de 200 euros para el propietario del bar por una falta contra el orden público.
Los hechos ocurrieron sobre las 0.20 horas del siete de octubre de 2007 en el local Café Bahiano, que está en la calle Calatrava de Valencia. Dos agentes adscritos al área de infracciones urbanísticas manifestaron ayer en el juicio que entraron en el establecimiento porque se oía el sonido de la música desde la calle. "Entramos al local, le pedí la documentación y el propietario empezó con malos modos. Después contestó: "No te voy a dar una mierda"", señaló uno de los agentes acusados. El policía añadió que cuando le volvieron a pedir la documentación les dijo que era unos "perros fascistas" y decidieron solicitar refuerzos.
En unos minutos llegaron otros seis policías, entre ellos un inspector que fue el encargado de volver a hablar con el propietario para pedirle que se identificase por lo ocurrido anteriormente.
Según el relato del inspector, el propietario le amenazó con darle dos tiros y posteriormente se marchó hacia el otro extremo de la barra y se agachó. "Pensé que podía agredirme con algún objeto contundente, un cuchillo o una escopeta, por lo que pasamos al otro lado de la barra para detenerle", explicó.
Según el fiscal, el propietario del bar telefoneó al 091 para pedir ayuda al Cuerpo Nacional de Policía. Los agentes de la policía local aseguraron que desconocían ese extremo e indicaron que "la gente del local se empezó a alterar. Optamos por desalojar el establecimiento porque lanzaban vasos mientras gritaban: "Policía fascista"". El agente indicó que el hijo del dueño del bar "cogió por el cuello" a uno de sus compañeros.

Grabación con el móvil
El fiscal sostiene que cuando el hijo del dueño del bar trató de grabar con el móvil lo que estaba sucediendo resultó reducido por los agentes, y, en la refriega, tanto los responsables del local como varios policías resultaron heridos.
El ministerio público pide penas de tres años y seis meses por detención ilegal y multas de 6.000 euros para cada uno de los seis agentes por dos faltas de lesiones.
Además, solicita que los policías locales procesados indemnicen al propietario del local con 1.260 euros y con 900 euros a su hijo por las lesiones y con 6.000 euros a cada uno de ellos por daño moral.

Respaldo de medio centenar de agentes
Medio centenar de agentes de la policía local asistieron como público al juicio que se está celebrando en la sección tercera para prestar su apoyo a sus compañeros. La sala se quedó pequeña y una veintena de agentes tuvo que seguir la vista de pie, aunque mantuvieron las formas en todo momento. El dueño del bar y su hijo declararon que los policías se extralimitaron. El propietario del local insistió en que fue agredido. La primera sesión de la vista terminó anoche a las 20.00 horas.